viernes, 25 de mayo de 2012

La crisis según Albert Einstein.





                                             
                                 Pintura de Pere Falguera - Salelles (Barcelona)




“No pretendamos que las cosas cambien, si siempre hacemos lo mismo. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países, porque la crisis trae progreso. La creatividad nace de la angustia, como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis, se supera así mismo sin quedar “superado”.
Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias, violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones. La verdadera crisis, es la crisis de la incompetencia.  El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto, trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla “

Albert Einstein





                                    Pintura de Pedro Falguera - Cercs (Barcelona)









domingo, 6 de mayo de 2012

MADRE-PADRE






                       Pintura de Pere Falguera - Torroellas de Mongrí (Girona) 2012



Mi Madre se fue hace poco más de un año, un mes y medio detrás de mi Padre, podría hablar mil maravillas de ambos, podría expresar los más profundos sentimientos, podría ofrecer el más grande homenaje que se pueda rendir, pero solo hay una palabra que  repito día si día también, “Gracias”, “Gracias”, “Gracias”.
Fueron dos seres humanos que les toco vivir como todos sus propias historias, fueron cobardes y fueron valientes, amaron y odiaron, rieron y lloraron, sintieron infelicidad y felicidad, vivieron en la escasez y en la abundancia, crecieron y envejecieron siempre juntos, a las verdes y a las maduras, fuero padres y lo hicieron  lo mejor que sabían  y a pesar de todo ello dejaron una estela y una huella imborrable: el amor, el amor hacia sus hijos.
Cada mañana cuando me levanto, un dulce sentimiento me embriaga, miro la fotografía donde ambos están sonriendo, no siento su ausencia física ni siento apego,  ahora sé que ellos nunca murieron, sé que viven eternamente en mí, están siempre presentes, ellos son……….. El amor.
Por eso cuando abro los ojos por la mañana digo: “Gracias”, “Gracia”, “Gracias”.




 
                        Pintura de Pere Falguera  - L´Argentera (Tarragona) 2012